Hoy en día parece evidente que cualquier persona puede sufrir un episodio depresivo en algún momento de su vida, desencadenado por factores externos. La pérdida de un ser querido, un despido laboral, una ruptura de pareja, problemas económicos recurrentes, entre otros, son eventos que pueden propiciar el desarrollo del trastorno depresivo. No obstante, existe un tipo de depresión que no se asocia a factores externos y no puede explicarse como consecuencia de un evento desencadenante. Se trata de la depresión endógena.
El concepto de depresión endógena ha causado mucho revuelo en la Psiquiatría contemporánea. Existe una gran controversia acerca de si se trata de una enfermedad contrapuesta a la depresión exógena o reactiva (la depresión cuyo origen está determinado a una serie de eventos o factores claros que la pueden desencadenar).
También podemos encontrar en los pacientes ciertas dificultades a nivel cognitivo. Por ejemplo la incapacidad para concentrarse o mantener la atención, y otros síntomas de tipo psicótico como ideas deliroides de ruina, culpa, hipocondría y, menos frecuentemente, alucinaciones visuales.
En la depresión endógena se observan alteraciones a nivel neurobiológico, principalmente en la segregación de hormonas como la serotonina. En multitud de pacientes se observa, además, una clara mejoría vespertina (los síntomas son más acusados por la mañana, manifestando el paciente una mejoría durante la tarde). Además, pueden existir factores genéticos implicados en la probabilidad de padecer este tipo de depresión.
La OMS calcula que alrededor del 4,5% de la población mundial sufre depresión, alrededor de 350 millones de personas. Afortunadamente hoy en día disponemos de multitud de tratamientos, tanto farmacológicos como psicoterapéuticos. En combinación pueden mitigar los síntomas y ayudar a la persona a retomar su vida. No obstante, un alto porcentaje de pacientes diagnosticados de depresión endógena abandonan el tratamiento, ya que pueden sufrir recaídas. Esto provoca un descenso en la motivación para continuar el tratamiento.
Gracias por leer nuestro artículo sobre Depresión endógena: Síntomas, características y prevalencia de la Clínica de Psicología y Psiquiatría MentSalud.